Ausente presencia

martes, 30 de octubre de 2007


Soy el maldito que habla tras la boca del mudo y a la vez un sordo que sólo escucha el palpitar agitado de una cuidad sin pausas. Soy aquel que todos miran con desprecio y hasta me esquivan para no tocarme, eso me ha hecho pensar en lo dispar de nuestras suciedades, mientras yo lo soy por fuera… ellos llevan la basura por dentro. Quien es mas limpio en esta jungla de asfalto?... quien es el que vive apurado y nunca tienen tiempo para nada, ni siquiera para dedicarle unas horas a su gente amada?


Es triste ver como soy una compañía para todo quien me necesita, pero cuando yo sufro carencias… nunca tuve a alguien en ese momento y me conformé con las gotas invernales que lavaron partes de mi cuerpo.

Ya da lo mismo, me queda poco entre uds., lo bueno es que no lo notarán… no lo harán hasta que se den cuenta que ya no me tiene que esquivar, sólo seré una traba menos en su deprimente camino.

Atte.

El que siempre estuvo ahí... pero nunca viste.

Una carta con miles de remitentes...

miércoles, 17 de octubre de 2007



Abrí mis brazos y me sentí tan libre como esa ave que dejaba un rastro de brisa en mi nuca, que rica sensación!!... sentir el raudo pasar de ese aire que me mantuvo con vida y hoy me despide acariciando mi rostro de forma poco sutil.

Esas imágenes que forman parte de mi álbum espiritual, están pasando por mis ojos y algunas me hacen tragar esa amarga lágrima que no alcanzó a rodar por mi mejilla, soy parte de un cuerpo cansado por la rutina y ansioso de la nada. Te vi pasar entre una de ellas, no pasaste como todas… al hacerlo dejarte una marca, de esas que sangran y no cicatrizan, no porque hayas causado daño sino porque es la señal de que sigues tan presente en mi como algún día sentí.

Doy gracias por este libre albedrío que me deja flotar entre mares de recuerdos y océanos de experiencias, gracias por que me permitiste ser alguien en la vida de otros y poder haber conocido cosas tan lindas como el amor.

Ya voy llegando, a mi se acerca el frío temor de sentir que me acabo de equivocar, que ya no quiero estar acá… quiero detenerme y se que no puedo, cierro los ojos y recuerdo unos brazos que siempre estaban abiertos para apretarme en mis momentos de tristeza, ahora los necesito para que paren esta trayectoria sin fin.

… No llegó, lástima… ahora sólo queda esperar otra vida, para tomar otra mala decisión como esta.

Cambios...

lunes, 15 de octubre de 2007


En mi cuaderno cayeron gotas de tinta que se esparcieron entre estrofas y metáforas, dejaron un camino perfecto a versos sin sentido y palabras sin alma; es ahora cuando más siento la frialdad de un trozo de papel, que no entiende lo que recibe ni sabe el valor de su función.

Me puse a pensar en mi actual momento y la figura que dibujo en el asfalto por estos días, en ese pedazo de carne y huesos que ha cambiado tanto en poco tiempo. Es que a veces ni mi propio espejo se atreve a mencionar mi nombre, por temor a equivocarse o darse cuenta que esos ojos que antes conoció ya no miran de la misma forma. Todos cambiamos y no hay edad para dejar de hacerlo… yo espero seguir haciéndolo, porque así he crecido como persona, expandiendo mis propios horizontes y abriendo mil puertas que yo mismo tenía cerradas.